sábado, 4 de junio de 2011

Dietas... ¿milagro?

Hola de nuevo.
Llega el verano, y con él, la "operación bikini". Todos queremos perder ese michelín, esa lorzita, o, aprovechando que vamos a tener que exhibir nuestro cuerpo, perder de una vez por todas esos kilos que nos sobran.
Y es justo en esta época cuando aparecen debajo de las piedras expertos en perder peso de forma milagrosa. En el trabajo, en el gimnasio, un amigo o amiga, vecino, etcétera... "A mí me ha ido fenomenal la de la alcachofa"; "pues a mí la de la sandía"; "le mejor, el método Ducan"; y así, una lista enorme de dietas milagrosas. Por supuesto, que no falte la crema que come grasa mientras duermes, o la pastillita mágica.
Y, ¿qué opino yo de todo esto?
Pues que no es un juego de niños. Las dietas deben ser personalizadas. Yo, más que dieta, soy partidario de llamarlo "educación del hábito alimentario". El objetivo, perder peso, sin perder masa muscular, evitando el futuro efecto rebote, y, a ser posible, sin pasar hambre, o pasarla de una forma soportable.
Para conseguir este objetivo, yo soy un defensor de las dietas de aporte proteico (DAP). Es una dieta pobre en lípidos (grasas), que aporta menos de 50 gramos de glúcidos (azúcares o hidratos de carbono) al día. Por tanto, está basada en un aporte de una cantidad de proteínas suficiente para mantener la masa magra y el balance nitrogenado equilibrado. Este aporte nutricional conduce a un estado metabólico conocido como cetosis, en el que aumenta la producción de glucosa endógena (desde el propio organismo) a partir de las grasas almacenadas.
Para ello, es necesario un estrico control médico, tanto previo, como durante la dieta, y un igualmente estricto control de los nutrientes.
Hay preparados en el mercado que contienen los nutrientes necesarios, consiguiendo incluso sabores y texturas agradables, lo que facilita el cumplimiento del plan.


Por su seriedad y rigurosidad científica, yo soy partidario de los productos "Protéifine", de laboratorios Ysonut. También porque de ellos he recibido mi formación en este tipo de dietas. Aunque hay otras opciones.
La dieta de aporte proteico es una buena opción para ponernos en forma para el verano, en dos a cuatro semanas, así como para reducir el sobrepeso. Eso sí, siempre bajo contro médico.


Cualquier duda o pregunta, no dudéis en hacérmela llegar.
Hasta otra.